El latido de donde vengo (Gregorio Castro)

la foto

Después de escribir libros académicos como Sociólogos y Sociología en Venezuela, y varios otros como El asalto del plural (donde en el capítulo sobre la” individualización” logra vincular la experiencia personal de enfermedad con un pensamiento filosófico y sociológico sobre la finitud humana), Gregorio Castro incurre en otros campos más sensibles en esa segunda etapa de

la vida que es la jubilación. Comienza por la pintura, muy colorida y estimulante, y después incurre en la poesía, de donde sale su libro El latido de donde vengo que, como dice el poeta Alexis Romero en la presentación, es un libro “de los vínculos, de los agradecimientos y de las nostalgias insuperables” con una voz que “asumió las leyes de la elipsis y el temblor de vivir”

Aquí el poema que lleva el título del libro:

El latido de donde vengo

Me devuelvo entre mil calles

y autopistas y senderos del cerro ajeno

y orillas de mi origen pegado a una esquina del barrio

a una ventana, una novia en el callado tumulto de la noche

me queda un olvido una fiesta un sudor

un cansancio y la ciudad erguida yéndose

y la vorágine del mundo que abre muros

para ocultar cada abismo privado

disuelto cada quien en la mudez

de la respiración

cada vez que dejamos de morir

¿para qué sirve recordar dónde anduve?

hacia donde fui no es haber llegado

¿para qué tanto pasado itinerario?

lo que importa es el latido de donde vengo